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Otras virtudes

 

Otras virtudes

Es un cap confeccionado con los restos del cap «Virtudes» de la edición de Cuenca (ocho puntos), a los que agrega otros diez nuevos de temática variada, que encajan en este título tan abarcante: «Otras virtudes». El Autor sitúa primero los puntos que se refieren a las virtudes teologales, después los relativos a las virtudes cardinales. Como dije, el cap tiene un cierto carácter remanente.


667* Los actos de Fe, Esperanza y Amor son válvulas por donde se expansiona el fuego de las almas que viven vida de Dios.


El Autor ordena el material cuidadosamente. Primero, esta alusión conjunta a las tres virtudes teologales, que tenía escrita en el Cuaderno VI, nº 852, 27-X-1932 , con un tenor literal idéntico .


668* Hazlo todo con desinterés, por puro Amor, como si no hubiera premio ni castigo. —Pero fomenta en tu corazón la gloriosa esperanza del cielo.


Después, la esperanza. Texto del Cuaderno VII, nº 1123, transcrito en 27-I-1934. El tenor literal del texto es idéntico al de C, con la variante señalada en apcrít. Ese mismo día transcribirá también la consideración que da origen al p/93. El tema y la formulación reaparecerá en los Ejercicios de 1935, como un propósito de la meditación «Pecados propios»: «quiero dar gusto a mi Dios, a mi Amado, cumpliendo su Voluntad en todo..., como si no hubiera premio ni castigo: solamente por agradarle»2b.

El Autor propone con profundidad y sencillez la relación entre las virtudes de la caridad y de la esperanza en la vida del cristiano. Todo en C está dominado por la idea del Amor con mayúscula («No hay más amor que el Amor», «El Amor bien vale un amor», etc.: vid com/171 y 417). Aquí emplea la expresión «puro amor», que inmediatamente recuerda al concepto –pur amour – que se hizo célebre en la teología espiritual del siglo XVII , pero con una comprensión teológica y antropológica realista, en la que el «amor amicitiae» (amor desinteresado) referido a Dios (Amor con mayúscula) atrae hacia sí, integra e ilumina al «amor concupiscentiae» (amor interesado), por la capacidad beatificante de ese mismo Amor en cuanto poseído. Dios quiere ser amado... y deseado . El fomento de la esperanza que aconseja el Autor, en oración adversativa, quiere descartar la exageración unilateral del «amor puro». Vid sobre el tema p/139, 182, 669, 765, 769 y 788 con sus com. En la literatura clásica española había una pieza poética –que Escrivá tendría, seguro, en la memoria y en el corazón–, que fundamenta plenamente la primera parte de este punto. Me refiero al célebre soneto anónimo del siglo XVI «A Cristo Crucificado» . La segunda parte del punto es pura doctrina bíblica y patrística: «Gaudete in spe aeternitatis» .


669* Está bien que sirvas a Dios como un hijo, sin paga, generosamente... —Pero no te preocupes si alguna vez piensas en el premio.


Texto escrito en Burgos sobre una octavilla Not. Por tanto en XII-38 ó I-39. En la meditación 99 pudo encontrar el punto de partida:
«Alabar, reverenciar, servir a Dios. Pero como un hijo: sin paga, generosamente» .

El lector habrá observado que, a cinco años de distancia, este punto tiene una doctrina, un ritmo doctrinal y literario, que es en todo semejante al anterior. Vid puntos citados en com/668.


670* Dice Jesús: «y cualquiera que deje casa o hermanos o hermanas o padre o madre o esposa o hijos o heredades por causa de mi nombre, recibirá cien veces más y poseerá la vida eterna»1.
—¡A ver si encuentras, en la tierra, quien pague con tanta generosidad!


Texto escrito sobre una octavilla Bl. No conozco interrelación documental.
Vid p/791, que incluye otra glosa a este pasaje de San Mateo.


671* Jesús... callado. —«Jesus autem tacebat»1. —¿Por qué hablas tú, para consolarte o para sincerarte?
Calla. —Busca la alegría en los desprecios: siempre te harán menos de los que mereces.
—Puedes tú, acaso, preguntar: «Quid enim mali feci?»2 —¿qué mal he hecho?


Punto procedente de una anotación escrita en los EjEsp que hizo del 19 al 28-VI-1933. El día 27 (Apínt, nº 1721) anota:
«Jesús... callado. Iesus autem tacebat. ¿Por qué hablo yo, contando mis penas? Callaré. Buscaré la alegría en los desprecios: siempre me harán menos de los que merezco. Puedo yo acaso preguntar: Quid enim mali feci?».
Es interesante notar cómo San Josemaría en su retiro espiritual escribe su meditación bíblica articulando las palabras de la Vulgata al compás de su pensamiento: la primera es de San Marcos, y el Autor introduce el sujeto de manera explícita: Jesús. En la segunda es él mismo quien habla en primera persona, dando la vuelta a las palabras de Pilatos acerca de Jesús: «quid enim mali fecit?» (Mt 27, 23) .
En 1932, en su intensa lectura del Decenario al Espíritu Santo de Francisca Javiera del Valle, acotó el siguiente párrafo:
«Y nos enseña [el Espíritu Santo] a que cuando con falso celo nos veamos perseguidos, acusados y reprendidos, guardemos riguroso silencio y les abramos nuestro corazón lleno de amor y cariño siempre que ellos nos busquen, sin darles la menor muestra de resentimiento» .
Al margen escribió la vivencia de Cristo que la lectura le había suscitado:
«Jesús callado!...» .
Es ése el fundamento del «silencio ante la acusación injusta» (vid p/173).


672* Está seguro de que eres hombre de Dios si llevas con alegría y silencio la injusticia.


Texto escrito sobre una octavilla Bl. En la meditación 117 hay un añadido hecho en Vergara, que dice:
«Fruto [de la penitencia]: ánimo firme para llevar con alegría y silencio la injusticia» .
La expresión «hombre de Dios» es muy característica del lenguaje de C, donde aparece 10 veces (p/205, 395, 414, 633, 672, 848, 909, 938, 961). Proviene de la Primera Carta a Timoteo (6,11), donde designa al verdadero seguidor de Jesucristo (6, 11-16) en contraste con los falsos doctores, que viven de espaldas al Evangelio (6, 3-10). El conjunto de los citados puntos de C ofrece los rasgos que configuran al «hombre de Dios». Tal vez el p/961 ofrece el perfil sintético. Cuando el Autor encuentra la palabra sacerdote en sus notas de predicación al clero, al tomarla para C frecuentemente la cambia por la expresión paulina –«hombre de Dios»–, para abarcar así a todos los cristianos.


673* Hermosa contestación la que dio aquel varón venerable al joven que se quejaba de la injusticia sufrida:
«¿Te molesta? —le decía—, pues, ¡no quieras ser bueno!...»


Texto escrito sobre una octavilla Bl. Procede sin duda de una anotación que se encuentra en la portada del sobre en que guardaba las Pláticas para sacerdotes que predicó en Vergara, septiembre de 1938. Allí se lee:
«– ¿Te molesta? Pues, no quieras ser bueno. –¿No quieres sufrir... la injusticia? No quieras ser bueno» .

«No quieras ser bueno», es decir, no cumplas con tu deber, no lleves una conducta recta. El sentido del punto parece éste: si vives tu trabajo profesional y tu responsabilidad humana con rectitud, sin acepción de personas, encontrarás incomprensiones y te harán injusticias. No te extrañes...
Da la impresión de que el Autor está narrando una anécdota con protagonistas concretos, que no podemos identificar. ¿Autobiográfico?


674* Nunca des tu parecer si no te lo piden, aunque pienses que esta opinión tuya es la más acertada.


Punto procedente del Cuaderno VI, nº 897, texto fechado en 27-XII-1932 . El tenor literal del texto es idéntico al de C.
El Autor vuelve sobre el tema en Surco, 263. Es un punto extenso, en el que enumera «algunas señales evidentes de falta de humildad» (diecisiete, en concreto). La cuarta es ésta: «dar tu parecer sin que te lo pidan, ni lo exija la caridad»13b.


675* Es verdad que fue pecador. —Pero no formes sobre él ese juicio inconmovible. —Ten entrañas de piedad, y no olvides que aún puede ser un Agustín, mientras tú no pasas de mediocre.


Texto escrito sobre una octavilla Bl. Hay una interesante información sobre el tema en un escrito de Juan Jiménez Vargas relativo a la convivencia con San Josemaría en la época de Honduras:
«Una vez hice un comentario duro sobre la mala conducta de un amigo. El Padre me interrumpió rápidamente. Más adelante me dio a leer lo que había escrito con motivo de aquel comentario» .

Y transcribe a continuación el punto que comentamos. Por la estructura del relato, que va siguiendo en principio un orden cronológico, Jiménez Vargas sitúa la peripecia que da lugar al punto en el verano del 37, sea dentro, sea ya fuera de la Legación de Honduras. Lo cual no quiere decir que el Autor lo escribiera entonces. No parece, en efecto, la octavilla del tipo de la serie Lh. El «más adelante» puede ser ya Burgos , a lo que me inclino.

«Ser un Agustín». El santo de Hipona, sobre todo a través de su célebres Confesiones, ha pasado a la imaginería cristiana como el prototipo de lo que es la conversión del pecado a la santidad, a la entrega total a Jesucristo.


676* Todas las cosas de este mundo no son más que tierra. —Ponlas en un montón bajo tus pies, y estarás más cerca del cielo.


Texto del Cuaderno VI, nº 841, transcrito en 14-X-1932 . Un eco de la primera frase en Surco, 886.
Parece que el punto guarda relación con un sucedido que San Josemaría refirió alguna vez y que quedó recogido en notas tomadas de su predicación de 1959:
«Había un pobre clérigo –¡sería algo más que clérigo!–, a quien pesaban mucho sus defectos, y quizá no le faltaban motivos. Todos los días debía trasladar al Santísimo y exponerlo en la custodia de su Convento; pero andaba siempre con escrúpulos. Hasta que un día el superior, con un talento sobrenatural muy grande, le llamó y le dijo: ¿tienes muchas miserias?, ¿muchas?, y ¿muy grandes? Pues reúnelas y colócalas todas debajo del ostensorio, y verás qué alto queda Jesucristo» .


677* Oro, plata, joyas..., tierra, montones de estiércol. —Goces, placeres sensuales, satisfacción de apetitos..., como una bestia, como un mulo, como un cerdo, como un gallo, como un toro.
Honores, distinciones, títulos..., cosas de aire, hinchazones de soberbia, mentiras, nada.


Texto del Cuaderno VI, nº 977, transcrito en 5-IV-1933:
Nótese en el apcrít que en C el Autor quita de la enumeración peyorativa al «burro» y pone en su lugar al «mulo»: su cariño al borrico fue sin duda determinante . Nótese también la belleza y fuerza expresiva del texto, la manera de construir las expresiones, que comunican el pensamiento, sin formas verbales, a través de una cadena de sustantivos con aliteración y acumulación de contrastes y paradojas. El patrimonio de ideas y de lenguaje rezuma a los clásicos del Siglo de Oro español . El texto del Cuaderno finaliza con la expresión «D.O.G».


678* No pongas tus amores aquí abajo. —Son amores egoístas... Los que amas se apartarán de ti, con miedo y asco, a las pocas horas de llamarte Dios a su presencia. —Otros son los amores que perduran.


Texto del Cuaderno VI, nº 968, transcrito en 25-III-1933 . El tenor literal del texto es idéntico al de C. Vid apcrít.
«No pongas tus amores aquí abajo». Es un principio radical de la vida cristiana, desde el que el Autor hará muy diversas propuestas, por ejemplo en Forja, 523, que comienza: «No pongas el corazón en nada caduco».


679* La gula es un vicio feo. —¿No te da un poquito de risa y otro poquito de asco ver a esos señores graves, sentados alrededor de la mesa, serios, con aire de rito, metiendo grasas en el tubo digestivo, como si aquello fuera «un fin»?


Es el primero de cuatro puntos (679-682) dedicados a la templanza en las comidas, como dignidad humana y como mortificación . Texto escrito sobre una octavilla Bl con rasgos de pluma gruesa. Francisco Botella nos ha dejado una noticia muy concreta del origen de este punto. Cuando Josemaría Escrivá, acompañado por Francisco Botella, dejó el Hotel Sabadell y se trasladó a la pensión de Concepción 9 (13-XII-1938), comían alguna vez en un Restaurante llamado «Venancia». Un día comentaron la manera de comer –voraz y solemne a la vez– de unos señores en la mesa de al lado. Al día siguiente, el Autor de C mostró a Botella la «gaitica»: ¿qué te parece? .
La anécdota –precisa después Botella- tuvo lugar el único día que cenó a solas con el Autor en «Venancia». En el Diario de Burgos, escrito por el propio Botella, se lee para el 15 de enero, domingo: «Permanecemos todo el tiempo en casa: escribiendo el Padre las últimas consideraciones, y llenando unas cuartillas yo, para los nuestros que no anunciaron próximo permiso. Cenamos juntos en Venancia» . Posiblemente el lunes 16 se escribió este punto.


680* En la mesa, no hables de la comida: eso es una ordinariez, impropia de ti. —Habla de algo noble —del alma o del entendimiento—, y enaltecerás ese deber.


Texto escrito sobre una octavilla Bl. Tiene un ritmo caligráfico y una grafía exacta a la del punto anterior. Debió escribirla a continuación, como completando la idea.


681* El día que te levantes de la mesa sin haber hecho una pequeña mortificación has comido como un pagano.


Texto escrito sobre una octavilla Re. Juan Jiménez Vargas aporta un recuerdo personal del origen de este punto: «Me parece que esto lo escribió con motivo de una carta que envié a Burgos. Claro está que la carta estaba redactada con el argot del momento y decía, en vez de ‘pagano’, ‘un mulo a la hora del pienso’. Hay que recordar que en el ejército de aque¬lla época, el mulo era el enemigo personal de todos, y el bicho más antipático que se podía encontrar» .


682* De ordinario comes más de lo que necesitas. —Y esa hartura, que muchas veces te produce pesadez y molestia física, te inhabilita para saborear los bienes sobrenaturales y entorpece tu entendimiento.
¡Qué buena virtud, aun para la tierra, es la templanza!


Texto escrito sobre una octavilla Bl. No conozco interrelación documental. El Autor describe con claridad las consecuencias de la «gula», centrándose en lo que los moralistas llaman la «hebetudo mentis», esa rudeza del espíritu que hace que el hombre sólo sea sensible para los bienes materiales y se haga progresivamente inepto para la vida intelectual y espiritual . Son célebres las consideraciones de la Antigüedad cristiana sobre el tema: «No debemos abusar de los dones del Padre, viviendo disolutamente, como el hijo pródigo del Evangelio; por el contrario, debemos usarlos como señores, sin inclinarnos ante ellos, pues hemos sido constituidos reyes y señores, no esclavos, de los alimentos» .


683* Te veo, caballero cristiano —dices que lo eres—, besando una imagen, mascullando una oración vocal, clamando contra los que atacan a la Iglesia de Dios..., y hasta frecuentando los Santos Sacramentos.
Pero no te veo hacer un sacrificio, ni prescindir de ciertas conversaciones... mundanas (podría, con razón, aplicarles otro calificativo), ni ser generoso con los de abajo... ¡ni con esa Iglesia de Cristo!, ni soportar una flaqueza de tu hermano, ni abatir tu soberbia por el bien común, ni deshacerte de tu firme envoltura de egoísmo, ni... ¡tantas cosas más!
Te veo... —No te veo... —Y tú... ¿dices que eres caballero cristiano? —¡Qué pobre concepto tienes de Cristo!


Texto escrito sobre una octavilla con dorso en blanco con las características de la serie Lh, escrita, en principio, en Honduras. Refleja, en efecto, antiguas vivencias del Autor, muy acusadas ahora ante la variedad de personajes refugiados en la Legación.

Sobre la expresión «caballero cristiano» vid com/379. No era un término de su lenguaje habitual, pero era muy de la época, ya un tanto estereotipado . En C aparece otras dos veces en sentido claramente positivo (p/390 y 925) . En éste, en cambio, tiene –lo mismo que en p/393– un sentido irónico, dirigido a quien abusa de ese nombre, usándolo como calificación honorífica y no en las obras28b.

684* Tu talento, tu simpatía, tus condiciones... se pierden: no te dejan aprovecharlas. —Piensa bien estas palabras de un autor espiritual: «No se pierde el incienso que se ofrece a Dios. —Más honrado es el Señor con el abatimiento de tus talentos que con el vano uso de ellos».


El cap se cierra con un punto procedente del impreso de Cuenca. Antes había sido incluido en el segundo cuadernillo a velógrafo. Está en el Cuaderno VI, nº 1033, transcrito en 7-VII-1933 . Casi idéntico al de C, excepto el guionado.
No he podido identificar al autor citado. En Forja, 995, hay un eco de la expresión de este autor: «Piensa qué grato es a Dios Nuestro Señor el incienso que en su honor se quema».

 

 

Cap 32 32 [Msb: 19]. Otras virtudes, p/667-684 [8 de Cec + 10 de Msb] C || Cap nuevo [ex 17. Virtudes, cd/234-235.254.256.259.264-266] Cec
667 Apínt Cec/56.3-Ceb/234
Futuros puntos de C transcritos ese día: 667, 266, 119.
«válvulas». En el Cuaderno precede «las», tachado.
668 Apínt Cec/56.4-Ceb/235 ||| cielo] Cielo Apínt
2b Apínt, nº 1818, 17-IX-1935. Pasará a ser la segunda frase de Forja, 1008.
Vid com/182.
Vid Santo TOMÁS DE AQUINO, Summa Theologiae, Iª q. 60 aa. 3 y 5; IIª-IIae qq. 23 a.1 y 26 a.3.
Dice así: «No me mueve, mi Dios, para quererte | el cielo que me tienes prometido: | ni me mueve el infierno tan temido | para dejar por eso de ofenderte. | Tú me mueves, Señor, muéveme el verte | clavado en una cruz y escarnecido; | muéveme ver tu cuerpo tan herido; | muévenme tus afrentas y tu muerte. | Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera | que aunque no hubiera cielo, yo te amara, | y aunque no hubiera infierno, te temiera. | No tienes que me dar porque te quiera: | pues aunque cuanto espero no esperara, | lo mismo que te quiero te quisiera». Sobre este soneto hay una extensa bibliografía. La más reciente investigación confirma el carácter anónimo del soneto y demuestra su atribución generalizada a San Francisco Javier. Vid Gabriel Mª VERD, «Soneto ‘No me mueve, mi Dios, para quererte’», en Charles O'NEILL - Joaquín Mª DOMÍNGUEZ, Diccionario Histórico de la Compañía de Jesús, IV, Madrid 2001, pgs 3607-10.
«Gozad con la esperanza de la eternidad»: San AGUSTÍN, Sermón 171, 5; BAC 443, 1983, pg 688.
669 Msb ||| preocupes] preocupes, Msb Txm
EjEsp, Meditación «Principio y fundamento», Vergara 5-IX-1938; guión nº 99.
670 Msb ||| [los dos párrafos en orden inverso en Msb del; Msb add indica el orden actual || tanta Txm] esta Msb |||| 1 Mt 19, 29
671 Apínt Cec/59.6-Ceb/254 ||| Puedes] Puedes, Cec |||| 1 Mt 26, 63; cfr Mc 14, 61 | 2 Cfr Mt 27, 23; Mc 15, 14; Lc 23, 22
La cursiva es del original. Una frase similar en boca de Jesús transmite San Juan: «Quis ex vobis arguit me de peccato?» (Jn 8, 46).
Decenario al Espíritu Santo, 1932, pg 71; Patmos 35, pg 83; Logos 52, pg 127.
Glosas marginales al Decenario 1932, pg 71. El subrayado es del Autor.
672 Msb ||| Dios] Dios, Msb Txm
EjEsp, Plática «Espíritu de mortificación y penitencia», Vitoria 24-VIII-1938; guión nº 117.
673 Msb ||| contestación] contestación, Msb Txm || venerable] venerable, Msb Txm
AGP, sec A, leg 50-4, carp 1, exp 2.
674 Apínt Cem32/155 Cec/60.2-Ceb/256 ||| parecer] parecer, Cec Txm
Futuros puntos de C transcritos ese día: 563, 571, 674, 890, 887, 58.
13b Detrás de ambos textos (el de C y el de Surco) está este «aviso» de la Madre Teresa que se anota en Camino/The Way, pg 237, nt 13: «Nunca se entremeta a dar su parecer en todas las cosas, si no se lo piden, u la caridad lo demanda» (Avisos, 16; BAC 212, 8ª ed, 1986, pg 859).
675 Msb
Juan Jiménez Vargas, Relatos testimoniales, III, pg 132.
En el Relato del 77, pg 16, Jiménez Vargas vuelve sobre el tema: «Lo escribió nuestro Padre [el p/675] –dice– con motivo de algún comentario impertinente que hice yo hablando con él acerca de uno de la Obra. En estas cosas el Padre era muy tajante. Si efectivamente había
algo que se le tenía que decir, y uno no hablaba con la más extremada delicadeza, o, incluso, había alguna expresión que era falta de caridad, reaccionaba rápido, con toda esa claridad tan suya. Y el que se encontraba con una de esas advertencias, no lo olvidaba nunca. Por eso me acuerdo de este comentario».
676 Apínt Cem32/135 Cec/61.5-Ceb/264 ||| pies,] pies Apínt Cec Txm
Futuros puntos de C transcritos ese día: 753, 730, 676, 214, 397, 685.
Notas de una meditación, Roma, Domingo de Resurrección, 29-III-1959; AGP, sec P, leg 18, pg 124.
677 Apínt Cem33/302 Cec/61.6-Ceb/265 ||| como un mulo] como un burro Apínt Cem Cec || como un gallo, como un toro] como un gallo Apínt
Para el tema del «borrico», vid com/420, 606 y 998.
Vid sobre este punto J. M. IBÁÑEZ LANGLOIS, Josemaría Escrivá como escritor, (2002), pgs 27 y 29.
678 Apínt Cem33/283 Cec/62.1-Ceb/266
Futuros puntos de C transcritos ese día: 601, 678, 422, 21, 910, 872.
679 Msb ||| esos Msb add] aquellos Msb del || en el tubo Msb add] por un extremo del tubo Msb del
El «clima» de estos cuatro puntos es similar al temple cristiano que propone CLEMENTE DE ALEJANDRÍA en los cap 1-4 de la Parte II de El Pedagogo; Fuentes patrísticas 5, Madrid 1994, pgs 279-366. Digno de leerse hoy.
Vid Francisco Botella, Relatos testimoniales, Madrid 1975-78, cap V, pg 60.
Diario de Burgos, 15-I-1939; Francisco Botella.
680 Msb ||| enaltecerás] praec harás más grata la hora Msb del
681 Msb ||| una Txm] alguna Msb || mortificación] mortificación, Msb Txm
Relato del 77, pg 16. La carta no se conserva.
682 Msb ||| ordinario] ordinario, Msb Txm || pesadez y molestia física Msb add] una pesadez, una molestia física Msb add del | una pesadez física Msb del
Vid Santo TOMÁS DE AQUINO, Summa Theologiae, IIª-IIae q.148 a.6.
CLEMENTE DE ALEJANDRÍA, El Pedagogo, II, 9, 2; Fuentes patrísticas 5, Madrid 1994, pg 297.
683 Msb ||| eres—,] eres— Msb Txm
Un devocionario o libro de rezos muy conocido en los años 20 y 30 escrito por el P. Vilariño S.J., se titulaba El Caballero Cristiano.
También en la Instrucción, 9-I-1935, nn 97 y 106 aparece el término en su más noble sentido: «La charla será el trabajo más hermoso y fecundo del Director, en este Curso Preparatorio. Los primeros días, se dedicará a inculcar en los jóvenes el espíritu de la Obra. Después, se hablará, sin excepción, de temas que lleven a los alumnos a conocer y a vivir la vida interior que ha de tener un caballero cristiano». «... y a fin también de sostener las asociaciones católicas e imponerse en las organizaciones oficiales, por sus conocimientos profesionales unidos a su rectitud de caballeros cristianos». Los subrayados son míos.
28b Vid en Camino/The Way, pg 148 nt 8, las interesantes consideraciones de Newman sobre el “gentleman” y el cristiano.
684 Apínt Cem33/328 Cec/60.5-Ceb/259 ||| condiciones... se pierden] condiciones, se pierden... Apínt || talentos Apínt Cem C] talentos, Cec Txm
Futuros puntos de C transcritos ese día: 794, 400, 190, 840, 709, 684, 598, 926.