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Capítulo
Punto 439
Amor de Dios · Punto 439

No olvides
que el Dolor
es la piedra de toque del Amor.

Piedra de toque: piedra –habitualmente jaspe granoso– con que los joyeros solían hacer el «toque» del oro o de la plata para asegurarse de su calidad.
Comentario

Este punto pudo ser redactado por San Josemaría durante su estancia en la Legación de Honduras en Madrid.

Durante el tiempo que pasó en aquel refugio diplomático predicó numerosas meditaciones a los que le acompañaban. En una de ellas dijo:

«Empeñémonos en ver la gloria y la dicha ocultas en el dolor. Si nos comportamos así, en todas nuestras acciones reinará la felicidad: esa felicidad en la Cruz, que es la que yo os deseo a todos. Dolor y amor: ése es nuestro camino. Al amor sólo se va por el dolor; y el que no padece, no conocerá nunca el verdadero amor de Jesucristo» [1].

Hay también anotaciones de este tipo en los guiones que preparó para las meditaciones de los Ejercicios Espirituales para sacerdotes y seminaristas que predicó en Vitoria y Vergara:

«Los santos... el Amor y el Dolor: mi ciencia es toda de amor...» [2].

«Coloquio: Dolor de Amor... vida de pureza» [3].

Ya se aludió más arriba a la significación que suelen tener los puntos que San Josemaría sitúa para abrir y cerrar los diversos capítulos de Camino.

Éste punto 439 tiene, sin duda, un carácter de síntesis de toda su doctrina acerca del «Amor de Dios».

El texto de la meditación que dio en la Legación de Honduras que se acaba de transcribir plantea una teología del Amor y del Dolor –de la Cruz– que me parece insoslayable. La expresión «piedra de toque» expresa con precisión icónica esa teología [4]: y el Amor –cuando es auténtico– acaba superando siempre a prueba del Dolor.



[1] Predicación de San Josemaría en la Legación de Honduras, «La tribulación de la guerra», 9-IV-1938, pg 36; IV. Vid Lucas F. Mateo-Seco, «Sapientia Crucis. El misterio de la Cruz en los escritos de Josemaría Escrivá de Balaguer», en Scripta Theologica 24 (1992) 419-438; especialmente 436-38.

[2] Ejercicios Espirituales, Plática «Espíritu de mortificación y penitencia», Vitoria 24-VIII-1938; guión nº 117.

[3] Ejercicios Espirituales, Meditación «Pasión», Vitoria 24-VIII-1938; guión nº 109.

[4] «Piedra de toque» es la piedra –de ordinario jaspe granoso– con que los joyeros hacían el «toque» del oro o la plata para asegurarse de su calidad. No he encontrado la expresión en otros textos de San Josemaría anteriores al que comentamos.

Lo emplea en dos ocasiones en unos textos sin fecha pero casi simultáneos:

«La abnegación, la inmolación de sí mismo es la piedra de toque de la verdadera virtud» (Meditación titulada «Espíritu de sacrificio»; guión nº 134). «

Contigo, sin ti, a pesar de ti. ¿Apóstol de pata libre? La piedra de toque: obediencia al Ordinario» (meditación a sacerdotes; guión nº 147).