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Capítulo
Punto 778
La voluntad de Dios · Punto 778

 Es bueno dar
gloria a Dios,
sin tomarse anticipos (mujer, hijos,honores...) de esa gloria, de que gozaremos plenamente con Él en la Vida...

Además,
Él es generoso...
Da el ciento por uno:
y esto es verdad
hasta en los hijos.

—Muchos
se privan de ellos
por su gloria,
y tienen miles de hijos de su espíritu.

—Hijos, como nosotros lo somos
del Padre nuestro,
que está en los cielos.
 

Comentario

Texto del Cuaderno IV, nº 270, fechado en 7-IX-1931, que dice así:

«Hay pues que dar gloria a Dios, sin tomarnos anticipos (mujer, hijos, honores...) de esa gloria de que gozaremos plenamente con El en la Vida... Además, El es generoso... Da el ciento por uno: y esto es verdad hasta en los hijos. Nos privamos de ellos, por su gloria: y tendremos miles de hijos de nuestro espíritu. Hijos: casi tan hijos, como nosotros lo somos del Padre Celestial, que está en los Cielos».

Como se ve, la anotación del Cuaderno estaba escrita como una reflexión personal y acerca del pequeño grupo de jóvenes que le seguían en el celibato apostólico, redacción que se refleja todavía en las cuartillas a velógrafo y en el texto de Cuenca. La ampliación del círculo de lectores que prevé para la edición de C en Valencia, le hace sin duda variar la redacción, de manera semejante a muchos otros puntos: el «nos privamos de los hijos» pasa a ser «muchos se privan de ellos». Interesante también una anotación manuscrita del Autor en el ejemplar a velógrafo que le entregó a su confesor. Con referencia a la última frase de este punto –«Hijos, como nosotros lo somos…»–, escribe al margen:

«Antes ponía ‘tanto como’… y lo corrigió Vd., Padre» [1].

El manuscrito del Cuaderno muestra que la primera redacción decía: «tan hijos como». La corrección introducida después en el propio Cuaderno dice: «casi tan hijos como». La precisión recomendada por el confesor era, en efecto, acertada, para subrayar la analogía buscada por el Autor. El texto a velógrafo dirá sencillamente: «como».

La reflexión describe los «anticipos» desde la situación personal del Autor: «mujer, hijos, etc.», y así pasó al manuscrito de Burgos. Las mujeres harán la lectura analógica: «marido, hijos, etc.».


[1] Anotación en el margen inferior de la pg 13r.