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Capítulo
Punto 495
La Virgen · Punto 495

A Jesús siempre se va
y se «vuelve»
por María.

Comentario

Texto del Cuaderno VI, nº 824, fechado por San Josemaría el 13-IX-1932 [1]. El tenor literal del texto es idéntico al de Camino.

La idea de ir y «volver» por María es una dimensión mariana de la vida muy hondamente metida en el alma de San Josemaría, que, firmaba: «Mariano».

El camino de «ida» lo describía en contexto eclesiológico con esta fórmula:

«Omnes cum Petro ad Iesum per Mariam» [2].

El camino de «vuelta». Ante el hundimiento del pecado (o de la tibieza: vid el punto 492) el amor a la Virgen es una garantía «dinámica» de la más completa regeneración. Ella, que es Madre, tiene la acogida de una madre...

San Josemaría y Álvaro del Portillo,en su juventud

Álvaro del Portillo ha contado cómo, en su juventud, le preguntó a San Josemaría –todavía no estaba publicado Camino, sino Consideraciones Espirituales– acerca del sentido de este «volver»:

«Entonces pregunté yo al Padre: Padre, ¿por qué ha puesto esto? Que se va por María, ya lo entiendo, pero que se vuelve....

Y me dijo: hijo mío, si alguno tiene la desgracia de separarse de Dios por el pecado, o está a punto de separarse porque le va entrando la tibieza y la desgana, entonces acude a la Santísima Virgen y encuentra otra vez la fuerza; la fuerza para ir al confesonario, si hace falta, para ir a la Confidencia y abrir bien la conciencia con gran sinceridad –sin que haya recovecos en el alma, sin que haya secretos a medias con el diablo– y por María, se va a Jesús» [3].

Posiblemente la anotación del Cuaderno es la elaboración de una reacción suya ante el Decenario al Espíritu Santo. Había leído:

«...así cuando pecamos y le ofendemos, como cuando le damos gusto y contento en todo, ¿qué es lo que quiere Dios que hagamos? Siempre ir a El con la misma confianza».

San Josemaría subrayó esa última frase, y continuó el subrayado para prolongarlo hasta la anotación que escribió al margen:

«Ir y volver a El por María» [4].

Sin duda, echaba de menos en este pasaje la dimensión mariológica de esa confianza. La anotación del Decenario funcionó a manera de «cuartilla» para el texto del Cuaderno y en última instancia para el punto de Camino.

La «ida» y la «vuelta» a Jesús por María había sido descrita por San Josemaría, sintéticamente en estas palabras, que son anteriores al punto de Camino que comentamos:

«El principio del camino, que tiene por final la completa locura por Jesús, es un confiado amor hacia María Santísima» [5].



[1] Futuros puntos de Camino transcritos ese día: 429, 599, 495.

[2] Vid los comentarios de los puntos 11, 247 y 833.

[3] Notas de un coloquio con Álvaro del Portillo, Madrid 4-IX-1977; la cursiva es del original.

[4] Glosas marginales al Decenario 1932, pg 105; Patmos 35, pg 115; Logos 52, pg 164.

[5] Santo Rosario, prólogo (el original es de diciembre de 1931; la cursiva es del original). —San Josemaría, muchos años más tarde, publicó una homilía en la que trata detenidamente el tema de este punto y que lleva como título: «Por María, hacia Jesús», incluida en Es Cristo que pasa, 139-149. Es de fecha 4-V-1957.

El tema «a Jesús por María» tiene un momento fuerte en la historia de la espiritualidad en la obra de San Luis María Grignion de Monfort. Vid sobre todo su libro Traité de la vraie dévotion à la Sainte Vièrge, Paris 1842 (Tratado de la verdadera devoción a la Santísima Virgen, Madrid, Apostolado de la Prensa, 1926).