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Capítulo
Punto 239
Examen · Punto 239

Una mirada al pasado. Y... ¿lamentarte?
No: que es estéril.
—Aprender:
que es fecundo.

Comentario

Camino punto 239

Texto escrito sobre una octavilla blanca y redactado posiblemente por San Josemaría a partir de este apunte que había tomado:

«Hay Cruz en España [1]. –No se acaba. ¿Por qué? –Falta espíritu cristiano. Oración. Sacrificio. Expiación. Amor. Reparación. –Por ahí... como si no hubiera guerra: ¡todos! –¿Lamentarme? ¡Estéril! Pensar, ante Dios, qué medios puedo yo poner: ... y ponerlos: lo de siempre: perfección en las cosas pequeñas» [2].

El apunte de este guión pone de manifiesto que la reflexión de San Josemaría recae sobre el problema o el drama colectivo que están viviendo durante esos años de guerra civil,, pero que inmediatamente lo mira en clave «personal», de responsabilidad personal y avanzando actitudes prácticas.

Guerra civil española, 1936-1939

La ocasión histórica queda trascendida en la formulación del punto, aplicable a la permanente experiencia del hombre. En realidad, y bajo esta peculiar perspectiva, San Josemaría está anticipando la doctrina que formulará más adelante en el punto 292: la vida cristiana es un continuo «recomenzar».



[1] Alusión a la situación dramática del país en medio de la cruenta guerra civil. El «no se acaba» parece referirse a la guerra. San Josemaría pone la situación en relación con una «falta de espíritu cristiano» en los ya «vencedores», que han vuelto a vivir «como si no hubiera guerra», sin espíritu de sacrificio y de servicio... A lo largo de toda su vida San Josemaría predicó incansablemente la necesidad de la coherencia entre las obras y la fe.

[2] Meditación «Stabant iuxta Crucem (Joann. XIX, 25)», a las Teresianas, Vitoria 19-IX-1938; guión nº 114.