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Capítulo
Punto 351
Estudio · Punto 351

Con ese aire de suficiencia resultas
un tipo
molesto y antipático,
te pones en ridículo,
y, lo que es peor,
quitas eficacia a tu trabajo de apóstol.
No olvides que hasta las «medianías»
pueden pecar
por demasiado sabias.
 

Comentario

Artemisia Gentileschi: Retrato de condottiero. 1622

Este punto es fruto de la síntesis de dos textos de origen diverso. El primer párrafo procede de una «gaitica» que San Josemaría escribió durante sus estancia en Burgos sobre una octavilla, en principio sin interrelación documental, que describe el riesgo de pedantería y presunción tan frecuente entre los académicos y los buenos estudiantes. Ya en los retiros que daba en la Residencia de Ferraz fustigaba estos defectos:

«–presunción (¿más que S. Tomás, Suárez, Bossuet, Balmes?)

–petulancia (es otra clase de presunción, más afeminada: borlas de ...?

–pedantería (términos técnicos – H2O – Médicos –ía –itis)» [1].

La octavilla que escribió en Burgos comprendía sólo el primer párrafo. El segundo párrafo tiene otro origen. Era una consideración procedente del capítulo «Virtudes» de la edición de Consideraciones Espirituales de Cuenca.

El original ese encuentra en el Cuaderno V, nº 803, 10-VIII-1932, y había pasado por el velógrafo. Dice así:

«No olvidemos que hasta las medianías pueden pecar por demasiado sabias» [2].

Este texto se había quedado descolgado, sin advertirlo, con ocasión de la profunda reelaboración que hizo San Josemaría del capítulo «Virtudes» en Burgos. Estando ya preparado el manuscrito para la imprenta, San Josemaría lo descubrió entre sus papeles y buscó el punto del futuro Camino con el que podría conectar. Fue este punto 351, a cuyo lado incluyó una tirita de papel con el texto mecanografiado.



[1] Plática «El estudio», 20/27-X-1935; guión nº 12.

[2] Futuros puntos de Camino transcritos ese día: 335, 815, 351, 813, 418.